El centro clandestino facturaba entre 600.000 y Bs. 700.000 de ganancia; mientras que una operadora
legalmente establecida su factura es de aproximadamente bs. 9.000
mensual
Tras un arduo trabajo de inteligencia, oficiales del Cuerpo de Policía Municipal de Colón desmantelaron una red colombiana, que desviaba llamadas internacionales hacia un centro clandestino en el Sur del Lago de Maracaibo.
El procedimiento se realizó en el centro comercial Tallo, ubicado frente a la terminal de pasajeros de Santa Bárbara del Zulia, municipio Colón, donde funcionaba el centro ilegal de telecomunicaciones.
El procedimiento se realizó en el centro comercial Tallo, ubicado frente a la terminal de pasajeros de Santa Bárbara del Zulia, municipio Colón, donde funcionaba el centro ilegal de telecomunicaciones.
Las intercepciones de llamadas se hacían desde Cúcuta y, muy probablemente, desde Bogota, se detuvo a Manuel Ulloque Soroca (35), un profesor de matemática e ingeniería de la Unesur, quien fungía como el operador principal; así como a otras tres mujeres, entre ellas dos menores de dad.
En el centro clandestino se incautaron 621 teléfonos locales de Cantv, 16 teléfonos celulares, 16 antenas, 9 miniteléfonos, dos fuentes de antenas, 6.400 tarjetas telefónicas y otras 680 simcard, 50 cargadores, cinco router y siete computadoras, entre ellas seis Canaimitas; así como un VolP para interceptar las llamadas.
La red internacional captaba las llamadas procedentes de una veintena de países, entre ellos Bolivia, Bosnia, Brasil, Bulgaria, Camerún, República de África Central, Francia y Estados Unidos, entre otros.
Graterol detalló que las llamadas eran transferidas desde Cúcuta hasta Santa Bárbara del Zulia, donde dejaban en espera por varios minutos al usuario para incrementar el saldo y, posteriormente, con el uso de las antenas y el Team River (un programa especializado), procedían a hacer el cobro internacional.
Otras de las modalidades empleadas era la transmisión de datos vía Skype, por espacio de siete días, con la intención de eliminar los rastros de la intercepción. Usaban igualmente el Team River, creando líneas falsas a través del centro clandestino de telefonía. este centro ilegal de llamada podía facturar mensualmente entre
En el centro clandestino se incautaron 621 teléfonos locales de Cantv, 16 teléfonos celulares, 16 antenas, 9 miniteléfonos, dos fuentes de antenas, 6.400 tarjetas telefónicas y otras 680 simcard, 50 cargadores, cinco router y siete computadoras, entre ellas seis Canaimitas; así como un VolP para interceptar las llamadas.
La red internacional captaba las llamadas procedentes de una veintena de países, entre ellos Bolivia, Bosnia, Brasil, Bulgaria, Camerún, República de África Central, Francia y Estados Unidos, entre otros.
Graterol detalló que las llamadas eran transferidas desde Cúcuta hasta Santa Bárbara del Zulia, donde dejaban en espera por varios minutos al usuario para incrementar el saldo y, posteriormente, con el uso de las antenas y el Team River (un programa especializado), procedían a hacer el cobro internacional.
Otras de las modalidades empleadas era la transmisión de datos vía Skype, por espacio de siete días, con la intención de eliminar los rastros de la intercepción. Usaban igualmente el Team River, creando líneas falsas a través del centro clandestino de telefonía. este centro ilegal de llamada podía facturar mensualmente entre
La Fiscalía 16º del Ministerio Público quedó comisionada para iniciar la investigación y determinar si existen otros centros clandestinos en el país que triangulaban datos; así como para la notificación de las autoridades internacionales para la captura de las otras células de esta red colombiana.
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